No hubo sorpresas. El show ha terminado, de momento. Todo ha sido una estrategia de Pedro Sánchez que como todos sabemos es capaz de engañarse a sí mismo. Ha movilizado este fin de semana a sus palmeros para dar una sensación de apoyo, pero al Presidente hay que recordarle que en su discurso de investidura hablo del «muro» que iba a separar a unos españoles de otros.

El «fango» del que habla repetidamente, lo ha creado él con sus políticas «independentistas» para mantenerse en el poder. Es el hombre que dividió España, dando un protagonismo inmerecido a los golpistas, independentistas, secesionistas y herederos del terror de ETA. Es el presidente que engañó diciendo que todo lo hace por la reconciliación y el bien de España. ¡Mentira! Lo hace por seguir con Begoña en La Moncloa.

Sánchez es el primero que ha entrado en la guerra del «fango«. Nominó a Oscar Puente para insultar, degradar y menospreciar al líder de la oposición. Apoyó a la Vicepresidenta, María Jesús Montero, para lanzarse al ataque acusando a Nuñez Feijóo de haber apoyado los negocios de su pareja. Se tiraron como hienas a por la pareja de Isabel Díaz Ayuso y su hermano. ¿Quien es el responsable del «fango»?

El espectáculo de este fin de semana pasará a la historia como la fiesta de exaltación del Partido Socialista hacia un hombre sobre el que siguen pesando muchísimas dudas sobre el comportamiento ético de su mujer. No hay que enviar a la mujer a la cocina para que trabaje el hombre. No, lo que hay que hacer es que la mujer del presidente de una Nación trabaje libremente, pero no que se aproveche de su posición para llevar a cabo actuaciones turbias, de las que los tribunales tendrán que decir algo.

Pedro, para este sermón que nos has largado ¿tenías que hacernos esperar cinco días? Se te ha visto el plumero una vez más. Fletaste autobuses con bocadillo para sentirte aclamado, que es lo que más te gusta, porque si hay algo que te distingue es tu egolatría.

Todo el mundo sabía que no ibas a dejar la Presidencia del Gobierno. Ya te vamos conociendo… Da ejemplo abandonando tu el «fango«. ¡Viva España!